Para poder planificar nuestras finanzas es necesario hacer un presupuesto y así saber cuánto gastamos en realidad.
Hacer un presupuesto es uno de los pasos iniciales para planificar una estrategia financiera. Esto nos permitirá saber principalmente con qué fondos disponemos y a dónde se van los recursos, es decir nuestro dinero.
Existen algunas ventajas de realizar un presupuesto, en primer lugar este nos permite establecer con antemano los gastos de acuerdo a nuestro estilo de vida e ingresos.
En segundo lugar de esta manera se puede conocer nuestra habilidad de comprometernos de acuerdo a la capacidad de pago que tenemos.
Luego, esto nos permitire incrementar la capacidad de ahorro y por último nos ayuda a determinar nuestra realidad económica.
Sin embargo, respetar un presupuesto personal no es algo sencillo. A veces puede ser frustrante y aburrido, sin embargo quienes lo hacen tienen mayor probabilidad de cumplir sus sueños futuros, en especial los financieros.
El presupuesto nos dice básicamente cuánto ganamos y cuánto gastamos. Esto se registra en un documento sencillo cuando hay un ingreso de cualquier clase que tenemos por un período, generalmente mensual.
El objetivo de hacer todo esto es poder vivir siguiendo un presupuesto mensual. Para ello se debe previamente hacer un seguimiento de cómo está fluyendo la relación ingresos-gastos hoy. La mejor manera de hacerlo es llevar un control estricto durante dos meses de todos nuestros gastos.
Este ejercicio servirá para mostrarnos nuestra situación, es decir ver en realidad en qué estamos gastando todo ese dinero.
Una vez hecho este ejercicio de nuestra dinámica de ingresos-egresos, se puede empezar a tomar decisiones y actuar.
En primer lugar, debemos tomar en cuenta gastos que no se pueden cambiar por ejemplo el alquiler de nuestra casa; estos gastos los dejamos a un lado y los llamamos costos fijos.
Luego evaluamos todos los otros gastos y vemos cómo podríamos mejorar nuestra salida de dinero ¿Podríamos ahorrar en algo? Talvez en lugar de tomar un transporte a un lugar cercano podríamos ir caminando. Cosas pequeñas que podemos cambiar que sin embargo sean ajustes que no se hagan de la noche a la mañana ya que el objetivo tampoco es el afectar nuestra capacidad de llevar la vida que queremos. No tiene sentido el privarnos de algo que consideramos importante pero sí podemos realizar pequeños ajustes que nos hagan mantener nuestro estilo de vida de manera eficiente y así ganaremos en el largo plazo.