
Los empleados de compañías “verdes” son más productivos según informe.
Un estudio realizado por la UCLA llamado “Environmental Standards and Labor Productivity: Understanding the Mechanisms That Sustain Sustainability,' ('Normas ambientales y la productividad laboral: comprendiendo los mecanismos que sostienen la sustentabilidad”) muestra cómo el compromiso ambiental de una empresa puede afectar su productividad.
El estudio fue realizado a través de una encuesta que se llevó a cabo a través de 5.220 empresas francesas en las que se hizo una selección aleatoria de dos empleados en cada una de las compañías, participando más de 10.000 personas, para calcular la productividad de cada empresa a través de un logaritmo de su valor agregado (ingresos menos gastos) dividido por el número de empleados, lo que ha indicado el valor promedio de la producción por empleado.
Los resultados revelaron que adoptar en una empresa normas internacionales y certificaciones medioambientales aumentaría la productividad de sus trabajadores en un 16%.
El informe constata que los trabajadores de compañías “verdes” están más motivados, reciben más formación y se benefician de mejores relaciones interpersonales, también tiene una mejor salud laboral al no utilizarse productos químicos para la limpieza de las instalaciones, etc.
La profesora Magali Delmas, economista ambiental del Instituto de Medio Ambiente y Sostenibilidad de la UCLA, quién realizó el estudio junto a Sanja Pekovic de la Universidad francesa París-Dauphine, sostiene que las certificaciones ambientales pueden ser utilizadas por los gerentes para aumentar la productividad, por los empleados como un signo de un mejor ambiente de trabajo, y por los inversores como un indicador de buenas prácticas de manejo.
Las tres certificaciones estudiadas fueron las eco-etiquetas, las etiquetas de comercio justo y la certificación ISO 14001. La certificación de comercio justo exige salarios razonables y no explotación ni trabajo infantil, la certificación orgánica reconoce compromisos tales como trabajar sin plaguicidas y otros productos químicos, y la certificación ISO 14001 exige a las empresas establecer una estructura organizativa para investigar el impacto medioambiental de la empresa y cómo reducirla.
El efecto de estas certificaciones en una mayor productividad se debe a la apreciación de los empleados de su lugar de trabajo. Las certificaciones ISO 14001, en particular, incluyen la educación y concientización de los empleados sobre el compromiso ambiental de la empresa y exigen a los empleados trabajar juntos para reducir el impacto ambiental de la organización. Esta educación y formación de los empleados ayuda a aumentar la identificación con su oficina, mientras que la cooperación interdepartamental aumenta el compromiso de los empleados.