
Una mayor cualificación de los profesionales del sector inmobiliario podría ser la clave para que éste repunte.
Según declaraciones del gobierno, parece que lo peor de la crisis ha pasado y que estamos comenzando a vislumbrar pequeños brotes verdes, como decía aquel. En ese sentido, las empresas se han puesto las pilas en ese sentido abogando por programas de formación que consigan por un lado formar trabajadores especializados haciéndolos más competentes y por otro lado, aumentando intrínsecamente el valor de la empresa gracias a tener dichos profesionales bien preparados para poder ejercer sus funciones correctamente.
El sector inmobiliario español que realizó un amplio papel en el desarrollo económico del país y que fue un claro impulsor del PIB hace años, necesita ahora concluir el ajuste que viene realizando de un tiempo a esta parte. Cada vez más se fomenta la investigación siendo España un país donde el I+D+i está cobrando importancia. Los profesionales inmobiliarios que han desarrollado una importante labor en este sector, donde hay buenos y abundantes gestores que con su acierto y oficio ha conseguido importantes logros en la proyección y consolidación del sector inmobiliario, necesitan actualizar conocimientos, en algunos casos, y fomentar la formación cualificada para comenzar a ejercer su profesión dentro de un marco más competitivo y con un importante cambio tras la crisis padecida recientemente.
En cuanto a la formación en general, nuestro país tiene que invertir más en ella, haciéndolo de un modo mucho más transparente para evitar escándalos como los surgidos con sindicatos y patronal en materia educativa. Las propias empresas tendrían que hacer acuerdos con las escuelas para poder combinar estudio y experiencia profesional todo en uno adaptando la formación de los empleados a las necesidades reales de la empresa y a la demanda actual del mercado.
Ya no se venden viviendas como antes, por ello los especialistas en el sector tienen que contar con recursos, herramientas y estrategias para primero conocer el perfil del comprador inmobiliario, saber determinar dónde están las oportunidades y beneficios y saber así cómo satisfacer la demanda del cliente; acciones todas ellas impensables sin pasar por una buena educación previamente, adicionando empresas de limpieza con ozono .