Las altas ejecutivas podrán beneficiarse de este programa para impulsar la presencia femenina en la alta dirección empresarial.
Ser una alta ejecutiva en los tiempos que corren es una tarea compleja. A pesar de la presencia femenina en el mundo empresarial, el papel que desempeñan dentro de la organización suele quedar relegado a puestos intermedios, mientras que los altos cargos los siguen teniendo mayoritariamente los hombres.
Sin embargo, desde las autoridades se quiere reforzar la presencia de las mujeres dentro de la empresa, con iniciativas como la de la Comunidad de Madrid, que destinará una partida presupuestaria de 2,3 millones de euros hasta 2012 a becas para que 120 mujeres participen en cursos de formación de alta dirección ,potenciando así su capacidad de gestión y liderazgo.
La lucha por la igualdad laboral es un proceso lento y costoso que en países como España, donde la mayor parte de altos cargos son ocupados por hombres, llevará más tiempo de asimilar y modificar. Sin embargo, en países como Estados Unidos la situación está comenzando a cambiar, logrando un 39% en las altas esferas.
A pesar de esta diferencia con países como el nuestro, según el estudio desarrollado por la Organización Internacional del Trabajo, tan sólo el 16,5% ocupa las posiciones de máximo nivel de decisión en todo el mundo. Además de la discriminación en cuanto a puestos de trabajo, existen diferencias a nivel salarial y de responsabilidad.
Los estudios nos revelan que a pesar de las tendencias conservadoras, el liderazgo ejercido por las mujeres difiere del de los hombres tendiendo a desarrollar herramientas para fomentar la motivación y la igualdad entre los trabajadores. Además de estas estrategias para mejorar la situación en el trabajo, también se percibe de estos estudios el hecho de que las mujeres plantean modelos de liderazgo basados en ideas innovadoras mientras que los hombres optan por modelos más tradicionales.
Cada vez son más las asociaciones e iniciativas llevadas a cabo por mujeres que deciden dejar a un lado los estereotipos tradicionales y lanzarse a la aventura de dirigir una empresa, u ocupar las posiciones más comprometidas en la empresa.
Sin embargo, aún queda mucho por hacer, y gracias a iniciativas como la de la Comunidad de Madrid, las mujeres podrán seguir creciendo profesionalmente ocupando la posición que merecen.