Actualmente el tratamiento de residuos es un problema a nivel mundial el cual se debe manejar mediante proyectos de separación y procesamiento de los residuos sólidos urbanos.
Desde que el ser humano dejó de ser nómada empezó a acumular residuos. Estos se acumulaban, más no eran un problema debido a su biodegradación.
Cuando se inició el sedentarismo se optó por depositar los residuos en las afueras de la ciudad. Esto ocasionó que la basura generada atraiga roedores e insectos que portaban enfermedades, por lo que se decidió quemar periódicamente los basurales. Aquella actividad se realizó por siglos, pero a medida que las ciudades se extendían los problemas antes descritos iban en aumento. Por esta razón, se recurrió a instalar plantas de reciclaje en varios lugares del mundo y se realizaron rellenos sanitarios.
Para el año 2000 las estadísticas mostraron que se producen entre 0,9 y 1,45 kg de residuos sólidos urbanos por habitante al día. Estos resultados son mayores para los países más industrializados.
Actualmente los problemas de residuos tienen como factores: el crecimiento de la población mundial, tendencia a la concentración de la población en las metrópolis, aumento sin mesura de las necesidades energéticas y materiales de las personas, y la temprana obsolescencia de diversos equipos, aparatos y artículos.
A estos factores se unen otros de menos importancia, pero todos contribuyen a que el problema de residuos sólidos se encuentre entre los de mayor preocupación a nivel mundial.
Sin embargo, los residuos no son solo un problema ambiental sino son un recurso que también se puede aprovechar. Esta realidad es un desafío, el cual consiste en una reducción del impacto ambiental, lo que implica hacer más eficaz el tratamiento de los residuos.
Para ello se debe en primer lugar identificar la problemática y luego plantearse objetivos. Un objetivo general sería el crear las bases para erradicar los basurales a cielo abierto y lograr que el manejo de los residuos sólidos se realice con el menor riesgo para la salud y el medio ambiente. Como objetivos específicos estarían el realizar la separación de componentes reciclables (papel, cartón, vidrio, aluminio y plástico) de los residuos peligrosos domiciliarios, reciclar la materia orgánica para que sea utilizada en forma de fertilizante orgánico, gestionar la comercialización de componentes reciclables y fertilizantes orgánicos, y enviar los residuos peligrosos a un adecuado relleno sanitario.