
Esta interesante profesión es muy creativa y brinda buenas perspectivas de futuro.
La profesión de diseñador genera bastante interés en los estudiantes, más que otras carreras universitarias. Elementos como usar las nuevas tecnologías en los procesos, el trabajo dinámico, el reconocimiento social de estos profesionales, la difusión mundial de trabajos e intervenciones, etc. le dan un mayor atractivo a estos estudios.
El diseño es una opción académica con una formación creativa y buenas perspectivas de futuro. Se usa por lo general en el contexto de las artes, ingeniería, arquitectura y otras disciplinas creativas y comprende muchos oficios dependiendo del objeto a diseñar. Hay algunas especialidades de diseño que se puede seguir:
Diseño gráfico: se refiere a la realización de composiciones, planos, dibujos, carteles, portadas de libros, periódicos y revistas, fotografías, proyectos de publicidad, etc. Existen diversas clasificaciones: diseño gráfico publicitario, diseño editorial, diseño de identidad corporativa, diseño web, diseño tipográfico, diseño multimedia, entre otros.
Diseño de productos: se trata de crear o modificar objetos para que resulten más útiles, con mejor estética o con más funcionalidades. El diseñador puede desempeñarse en distintos campos como la joyería, vehículos, maquinaria de todo tipo, mobiliario, etc. ocupándose de modificar o crear todo tipo de productos, desde tornillos y piezas de máquinas, pasando por elementos prefabricados para la construcción, hasta bicicletas, coches o electrodomésticos.
Diseño de interiores: se encarga de todo lo relacionado con la ambientación y decoración de edificios, parques y jardines, y elementos urbanos. Este diseñador debe satisfacer las necesidades de las personas en lo que se refiere a los espacios habitables, teniendo en cuenta los aspectos estéticos y tecnológicos.
Diseño de moda: se ocupa de coordinar y preparar todo el proceso de creación y fabricación de ropa y accesorios.
Por último, diseñar no es simplemente crear, requiere de consideraciones funcionales y estéticas y un proceso de planificación del trabajo: investigación, análisis, modelado, ajustes, adaptaciones, producción, etc. Para ser un buen diseñador es importante formarse y practicar bastante.