Se ha creado una membrana que reemplazaría a las baterías y pilas que usamos a diario.
Un equipo de la Iniciativa Nacional para la Nanociencia y la Nanotecnología de la Universidad de Singapur (NUSNNI) ha desarrollado una membrana apta para almacenar energía eléctrica. Esto significa que las baterías y pilas que manejamos todos los días podrían ser sustituidas en corto tiempo. A diferencia de las baterías tradicionales, que necesitan electrolitos y complejas estructuras, el nuevo material consiste en una sencilla membrana, muy delgada, que además de ofrecer mayor rendimiento energético es más económica y considerada con el medio ambiente.
Los investigadores usaron para su fabricación, un polímero de poliestireno que, al ser colocado entre dos placas de metal cargadas, es capaz de almacenar una carga de 0,2 faradios por centímetro cuadrado. Esto supera a los condensadores estándar, que tienen como límite de almacenamiento 1 microfaradio por centímetro cuadrado.
El coautor del trabajo, Xie Xian Ning, ha señalado que la eficacia de la nueva membrana permite crear dispositivos muy sencillos y de bajo coste de fabricación, con un mayor rendimiento que las baterías recargables de iones de litio, las baterías de plomo-ácido y los supercondensadores.
Estas membranas tienen varias aplicaciones que van desde los vehículos híbridos hasta los paneles solares y las turbinas eólicas. Así lo afirman sus creadores en la revista Energy & Environmental Science.