
Según un estudio, el comercio electrónico creció un 16,3 por ciento en España durante el primer semestre de 2012 hasta alcanzar una facturación de más de 5.000 millones de euros, lo que lo convirtió en el único canal de distribución que incrementó sus ventas.
Parece ser que hay algunos sectores que capean el temporal que ha provocado la crisis y para los que se espera un repunte a lo largo del año 2013; es el caso del comercio electrónico o e-commerce, que según el estudio elaborado por ESADE, ha experimentado un notable crecimiento según los datos del año anterior y que seguirá haciéndolo durante este año. Sin embargo, el mismo estudio revela que el minorista ha acumulado una caída del 22 por ciento durante los últimos cuatro años. De hecho, durante 2012 el consumo cayó un 7,8 por ciento y únicamente los comercios de lujo de ciudades como Madrid y Barcelona consiguieron mantener el nivel de ventas, gracias al impulso del turismo y al incremento del sector del lujo en un 25 por ciento.
Como siempre venimos comentando, las necesidades del comprador cambian, pero también lo hace el mercado en sí. La falta de tiempo para realizar compras, la buúsqueda de mejores precios, el incremento del número de hogares unipersonales y las nuevas tecnologías han cambiado los hábitos de consumo puesto que el cliente de hoy día compra lo que quiere, cuando quiere y a través del medio que les resulte más cómodo.
Algunas de las firmas textiles más reputadas del país como las pertenecientes al grupo Inditex se han sumado a la moda de la venta online y disponen de herramientas y plataformas virtuales en las que el comprador puede hacerse con lo que desee en un solo clic: fácil, rápido y cómodo.
Se estima que en 2016 el comercio online crecerá un 50 por ciento en todo el mundo en el apartado de ventas al detalle y alcanzará los 1.000 billones de dólares, por lo que es imprescindible que los comercios se adapten a esta realidad y apuesten por el pago a través del móvil y por la promoción a través de las redes sociales.