
Según los sondeos, nueve de cada diez empleados prefieren un jefe cercano, que sepa motivar y razonar frente a los de corte más autoritario. Conceptos como los de inteligencia emocional o coaching están abordando el mundo profesional, por lo que los buenos directivos han de ponerse al día para tratar a sus empleados de una forma más empática.
La globalización ha propiciado la interrelación con personas de todos los rincones del mundo, pero sin embargo ha provocado que haya un enfoque más orientado hacia la consecución de resultados y cumplimiento de los objetivos empresariales establecidos, más que hacia cuidar el buen funcionamiento del equipo.
Un buen directivo ha de saber liderar un equipo, motivarlo, hacerle razonar, favorecer actitudes como la perseverancia, agilidad mental, el altruismo y la cooperación para lograr obtener un mayor rendimiento por parte de los trabajadores y poder tener una buena relación con los mismos.
El concepto de 'inteligencia emocional' es precisamente a lo que se refiere todo lo anterior. Es una forma de interactuar con el mundo que tiene muy en cuenta los sentimientos, y engloba habilidades tales como el control de los impulsos, la autoconciencia, motivación, el entusiasmo, la empatía, etc. Ellas configuran rasgos de carácter como la autodisciplina, la compasión o el altruismo, que resultan indispensables para una buena y creativa adaptación social. Aplicable a prácticamente cualquier área, ya sea educación, atención al cliente, marketing, se dirige especialmente a jefes, directivos, o en general a todas las personas que se dedican a la ayuda de otras personas tanto individual como colectivamente, también a cualquier persona que quiera aumentar su consciencia sobre lo que realiza cada día, cómo lo realiza y que tiene que cambiar para tener más éxito en su vida.
Gracias a la introducción de este concepto en la actividad profesional, se han creado nuevas profesiones, como la figura del Coacher, que instruye a los empleados sobre cómo gestionar el tiempo, cómo organizarse, resolución de conflictos a nivel laboral y personal, para lograr un mayor rendimiento del trabajador y que desempeñe sus funciones más eficazmente. Proveniente de la influencia norteamericana, sinónimo a la figura del coacher, el 'mentor' apoya y 'guía' de algún modo la carrera profesional del empleado.
Debido al gran boom relacionado con esta nueva tendencia, las empresas están inculcando a sus líderes que sean más benévolos y cercanos a los empleados y que puedan ponerse en el lugar de los trabajadores tendiendo una mano amiga para lograr que su equipo funcione a la perfección.
Un buen coach sacará tu mejor lado para que desempeñes de forma óptima en tu labor profesional y en tu vida personal, sin embargo si lo que más te interesa es formarte como líder empresarial revisa nuestra lista de cursos de liderazgo directivo, en donde podrás iniciarte en cómo ser un líder o volverte todo un experto en liderazgo y coaching organizativo.